Este polímero funcionó como fijador para el cabello porque es soluble en agua. Esto significa que podía ser eliminado cuando uno se lavaba el cabello. Pero su afinidad por el agua le dio una desventaja. La polivinilpirrolidona tiende a fijar el agua del aire, confiriéndole al cabello esa apariencia viscosa que era tan común en los años '60.

Esto fue superado con la ayuda de otro polímero, una silicona llamada polidimetilsiloxano. Para entender cómo se lograron fijadores de cabello mucho mejores por medio de esta silicona, veamos primero cómo funciona un fijador. Cuando usted lo rocía sobre su cabeza, la polivinilpirrolidona forma una fina capa en el cabello. Esta capa es rígida e impide que el cabello se mueva.

Ahora veamos qué ocurre con dos clases distintas de polímeros. Si se agrega un poco de silicona en el fijador, ésta y la polivinilpirrolidona formarán dos capas diferentes una vez que estén en contacto con el cabello. En este cuadro, usted puede ver a lo que llegamos:

La silicona forma una capa encima de la capa de la polivinilpirrolidona, que impide el contacto directo con el agua, dándole al cabello una apariencia más natural.

Pero ésto no es todo lo que puede hacer la polivinilpirrolidona. También se encuentra en los pegamentos para madera terciada. Pero si desea un uso más emocionante que ese, le diré que este polímero realmente puede salvar vidas. Cierta vez, durante la primera mitad del siglo XX, alguien descubrió que a un paciente que haya perdido mucha sangre, se le podía administrar plasma sanguíneo, el cual lo mantendría vivo hasta tanto se le pudiera efectuar una transfusión. Pero a veces hasta el plasma sanguíneo es difícil de conseguir y debió pensarse en alguna forma de hacerlo durar el mayor tiempo posible. Fue como la eficacia de la polivinilpirrolidona se puso a prueba en un campo de batalla. Durante la Segunda Guerra Mundial y la Guerra de Corea, el plasma sanguíneo fue diluido con polivinilpirrolidona, de modo que más heridos pudieron ser tratados con las cantidades limitadas de plasma sanguíneo. Claro que la idea mucho más sencilla de NO tener una guerra, parece no habérsele ocurrido a nadie.

La polivinilpirrolidona es un polímero vinílico (¡no! ¿en serio?). ¿Quiere saber cómo se hace este material? Lo hacemos a partir del monómero vinilpirrolidona, por polimerización vinílica por radicales libres.

Así se ve el monómero en 3-D:

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